Desde que me dio por ponerme al día con mis propios proyectos lo llevo bastante bien, éste es uno de los pocos que tenía pendientes y es de las vacaciones del verano pasado así que no voy nada mal. Lo tenía atascado encima de la mesa desde navidades pero ya por fin lo terminé el otro día. Es la primera vez que hago esta encuadernación semi-escondida y me ha encantado. Para la tapa he partido y pintado maderitas de las de los helados, simulando tablillas de madera y queda muy chulo con las conchas y la pluma.
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