Siempre hay un motivo para sonreir y eso es justo lo que quería que pensara la persona a la que regalé este espejo en Navidad. Fue un regalo para mi madre, que quería un espejo en tonos verdes y naranjas "a juego con las cortinas de la habitación". Como acaban de despedirla del trabajo (ya sabéis como está todo), quisé poner un mensaje muy positivo y así cada vez que mire el espejo recordará que, aunque todo vaya mal, siempre hay algun pequeño detalle que hace escapar una sonrisa.
Además del espejo, mi madre también me había pedido un marco de fotos para sustituir uno que tenía roto. Como ya sabía la foto que iba a llevar lo hice en tonos que fueran a juego y le gustó mucho el resultado. Así se ve bonito, pero os aseguro que con la foto luce muchísimo más.
Nota: Estoy enlazando éste post a la fiesta de enlaces de Arte Friki.
qué bonitos! han quedado muy bien!
ResponderEliminarkissitos!!
te han quedado estupendos los dos!
ResponderEliminarhan quedado `preciosos!!
ResponderEliminarMuy bonitos los dos. El espejo me ha encantado, tanto las telas como los detalles, los dos cuadritos de la esquina izquierda me encantan, no tiene desperdicio. Vengo de la Fiesta de Enlaces de Arte Friki, me ha gustado descubrir tu blog y me apunto a seguirlo. Mi blog es abargoartesania.blogspot.com estaré encantada de recibirte en él.
ResponderEliminarBesos
Que bonitos!! No conocia tu blog me ha gustado mucho :)
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